Coles de Bruselas: Trucos para cocinarlas
Si las compramos frescas, debemos colocarlas en el lugar menos frío de la nevera. Hay que taparlas pero en recipientes que no sean de plástico ya que se oscurecen.
Si se quiere congelar, se debe de elegir pequeñas, con las hojas prietas.
En casa, lo ideal es blanquearlas, pasarlas por agua hirviendo durante 2 o 3 minutos con algo de sal, después le añadimos agua con hielo para cortar la cocción y la escurrimos. Para congelarlas las introducimos individualmente separadas y tapadas para que no se peguen y ennegrezcan.
Hay varias formas para cocinarlas de forma saludable:
- Elaboramos un refrito de cebolla y ajo, colocamos las coles encima una vez cocidas y la introducimos en el horno que previamente lo hemos calentado a 180 º C y cocinamos durante 5 minutos, así se mezclarán los sabores quedando un plato nutritivo y sabroso. Si os gustan las especias se le puede añadir tomillo y un poco de vino blanco antes de introducirlas en el horno.
- También se pueden presentar en ensaladas y para ello las cocemos antes y las escurrimos. Las cortamos en cuartos y las salteamos en una sartén con un poco de aceite de oliva y ajo picado. La retiramos cuando estén echas y las mezclamos con pimientos del piquillo asado, unas anchoas y una vinagreta de aceite de oliva con vinagre de manzana o frambuesa.
Consejo Nutrición Center:
Las coles de Bruselas no se pueden comer crudas, ya que no se digieren bien.

Pablo Caceres
Chef Grupo NC Salud